Alguna vez, ha posido suceder, que nos hallamos sentido como estancados, inmersos en la desgana, a merced de los vientos, lo que tienes no te gusta, pero es lo que hay; la vida, carrera profesional, los negocios, etc., no van como quieres y no te gusta, pero tampoco puedes hacer demasiado porque pareces no tener la suficiente fuerza para generar un cambio. Se puede optar por esperar a que pase el temporal o a recaudar las suficientes fuerzas para poder generar este cambio que se está necesitando; se puede esperar a que las circunstancias cambien pero sería ideal poder cambiar el panorama por nosotros mismos. Qué hacemos mientras nos quejamos, esa es una pregunta que nos debemos responder con toda sinceridad para poder llegar a comprender la raiz verdadera del problema. No es que nosotros tengamos la culpa, no es eso, pero quizás podemos hacer algo y no lo sabemos. Sometidos a la dictadura de la inercia que nos arrastras, el sujeto parece perder un poco el norte; y, pudiera ser